A la hora de seleccionar una solución de codificación láser para envases industriales o identificación de productos, los láseres de Fibra y CO₂ siguen siendo las tecnologías más utilizadas. Su longitud de onda, absorción de materiales, rango de potencia y costes operativos son muy diferentes, por lo que elegir correctamente es esencial para la eficiencia de producción. Proveedores reconocidos como Meenjet y Domino ofrecen sistemas maduros en ambas categorías, brindando opciones fiables para diversas aplicaciones.

Los sistemas láser de CO₂ operan a 10,6 μm, una longitud de onda fuertemente absorbida por materiales orgánicos y no metálicos. Esto los hace ideales para cajas de papel, botellas de PET, etiquetas, madera, films flexibles y vidrio. Suelen tener potencias entre 10W y 60W para marcación en línea, ofreciendo códigos limpios y de alto contraste mediante ablación térmica a gran velocidad. Se usan ampliamente en líneas de alimentos, bebidas y farmacéuticas, con un coste inicial más bajo. Marcas como Meenjet y Domino disponen de modelos optimizados para producción continua, aunque los tubos de CO₂ tienen una vida útil más corta que las fuentes de Fibra.
Los sistemas láser de Fibra operan a 1064 nm, una longitud de onda absorbida de forma eficiente por metales y plásticos técnicos. Son ideales para latas de aluminio, piezas de acero inoxidable, cables, componentes electrónicos y materiales automotrices. El rango típico de potencia es de 20W a 100W. Los láseres de Fibra ofrecen alta resolución, grabado profundo, coloración por capa de óxido y una vida útil prolongada con mínima zona afectada por calor. Gracias a estas ventajas, los equipos de Fibra de Meenjet y Domino se utilizan ampliamente para trazabilidad, códigos seriales y marcado UDI donde la permanencia es esencial.
Para elegir entre ambos, el tipo de material debe ser el factor principal:
• Para metales y plásticos duros, el láser de Fibra es la mejor opción.
• Para empaques orgánicos o a base de papel, el CO₂ ofrece un excelente rendimiento a menor coste.
Ambos tipos permiten codificación sin contacto a alta velocidad, adecuada para líneas de producción automatizadas. Al combinar la absorción del material con el coste operativo a largo plazo, los fabricantes pueden seleccionar la solución más eficiente, ya sea un sistema Meenjet para alta rentabilidad y flexibilidad, o un sistema Domino para operaciones industriales de gran volumen.